Procrastinación: cuando el aplazamiento se convierte en un problema

Procrastinación: cuando el aplazamiento se convierte en un problema

Editado por: TOP DOCTORS® el 29/03/2023

La procrastinación o aplazamiento de tareas alimenta pensamientos distorsionados de incapacidad o falta de inteligencia. Empezar a reestructurar todas esas creencias genera que la persona confíe más en sus capacidades y las pueda fortalecer.

 

La procrastinación es un hábito que consiste en postergar actividades o situaciones que se deben atender por otras que generan más satisfacción momentánea. Las personas aplazan las actividades que deben hacer generalmente por pensamientos relacionados con la incapacidad de hacer alguna tarea, pero también por factores como el Estrés, la falta de sueño y los malos hábitos alimenticios.

 

La procrastinación está relacionada con el sistema límbico, que es el área del cerebro encargada de la satisfacción inmediata o también de los de las conductas impulsivas.

procrastinación

¿Cuándo debe considerarse un problema?

 

El tema es que, si las personas que procrastinan pudieran aplazar sus actividades y descansar tranquilamente, podríamos hablar de que hay un descanso o un bienestar. Sin embargo, lo que sucede es que estas personas, cuando sustituyen esa actividad por otra como, por ejemplo, ver televisión o estar en redes sociales, están pensando en las obligaciones que tienen que cumplir. O sea que no tienen tranquilidad, no descansan, no se toman una pausa para continuar, sino que están pensando en aquello que no hacen.

 

Dichas situaciones alimentan muchos pensamientos distorsionados como “no soy capaz”, “debería estar haciendo eso”, “es porque no soy tan inteligente”, entre muchos otros, los cuales que no permiten que la persona esté tranquila.

 

Esta situación afecta a la salud mental debido a que genera Estrés, Insomnio y alteraciones en los hábitos alimenticios.

 

¿Cómo afecta la calidad de vida?

 

Un punto clave es la irritabilidad, porque genera malestar en las relaciones interpersonales. Asimismo, los pilares de la Autoestima se ven afectados, incluso el desempeño laboral o estudiantil.

 

La procrastinación puede afectar la calidad de vida de la persona porque, aun cuando esta tenga las capacidades, al creer que no las tiene y hacer las cosas a última hora, las cosas no salen de la misma calidad que si realmente tuviera toda la concentración y la disposición para cumplir las actividades.

 

¿En qué consiste el tratamiento?

 

Teniendo en cuenta que la procrastinación está muy ligada a creencias sobre uno mismo, sobre las capacidades propias y pensamientos distorsionados, la Reestructuración Cognitiva funciona muy bien, ya que en terapia se trabajan todos esos pensamientos recurrentes ligados a una creencia específica, a unos esquemas mentales.

 

Empezar a reestructurar todas esas creencias genera que la persona confíe más en sus capacidades, que vea también sus debilidades y las pueda fortalecer y se pueda capacitar para emprender más acción que pasividad, teniendo como resultado que la persona quiera realizar sus actividades, se sienta más confiado, comprenda que puede ser exitosa y que la procrastinación vaya disminuyendo.

 

¿Cuáles son los resultados esperados?

 

Está claro que no podemos estar motivados todo el tiempo. Pero cuando la motivación se va, lo que queda es el compromiso, entonces, como resultado de la terapia de Reestructuración Cognitiva, vamos a tener personas más comprometidas, que confíen más en sus capacidades, que empiecen a priorizar lo que es importante, lo que es urgente dentro de lo que es urgente, lo que se puedo delegar, a ser mejores organizadores de nuestro tiempo, para de esa manera tener más éxito.

 

En la medida en que yo acumule más éxitos pequeños, tales como: hoy me pude levantar temprano, me bañé antes de trabajar, llegué temprano a la oficina; cosas pequeñas, a medida que yo pueda centrar la atención en que las cosas que estoy cumpliendo, iré generando más confianza en que puedo cumplir unas más complicadas.

 

Se debe consultar con un psicólogo en caso de sentir malestar por la continua procrastinación. Este problema es algo que ha crecido mucho y se ha vuelto muy común, lo que no quiere decir que sea bueno o positivo, ni que nos lleve a cumplir nuestras metas o a tener una vida satisfactoria. Debemos recordar que la satisfacción proveniente de aplazar tareas es momentánea, mientras que la satisfacción a largo plazo, la satisfacción real solamente proviene de podamos realmente cumplir nuestras metas, sentirnos útiles y capaces. Esto resulta en una felicidad a largo plazo, una felicidad constante.

 

Psicología en Bogotá