¿Qué es la Fijación de Columna?
La Fijación de la Columna Lumbar es un proceso diseñado para la recuperación, estabilidad o corregir la alineación de las Vértebras, en caso de que exista una alteración.
Estas alteraciones pueden ocurrir por procesos Degenerativos, Postquirúrgicos, Congénitos o Traumáticos.
¿Por qué se realiza este proceso?
En algunos casos este proceso de fijación se realiza a través de tornillos transpediculares, que se insertan en las Vértebras a través del Pedículo (porción que une la parte anterior (cuerpo) y la posterior (arco) de la Vértebra).
En otros casos se asociarán Cajas Intersomáticas, una especie de cuñas que se colocan entre las vértebras, las cuales permitirán obtener otro punto de apoyo, a la vez que dotará de mayor estabilidad a la Columna.
Si bien estos son los métodos más frecuentes existen otros muchos, tales como los Dispositivos Interespinosos, Tornillos a Masas Laterales, Tornillos Laminares, entre otros.
Los especialistas en Neurocirugía pueden recomendar la Fijación de la Columna en caso específicos como la corrección de Columna, en caso de que exista Inestabilidad de la Columna o como consecuencia de una intervención quirúrgica.
La Fijación será común en intervenciones como la Hernia Discal, en la Columna.
¿Existen riesgos en este proceso?
Aunque son poco comunes existen algunos riesgos como la Lesión Neurológica que ocurren cuando se introduce el material.
Por eso es importante que los especialistas en Neurocirugía utilicen Métodos Radiológicos para tener información en todo momento sobre la ubicación del material implantado, sea por medio de imágenes de Rayos X, TAC Intraoperatorios o Sistemas de Neuronavegación.
¿Qué indicaciones debe seguir el paciente?
El proceso de recuperación de la Fijación de Columna debe ser cuidadosa, la musculatura debe cicatrizar y se deben evitar complicaciones. A partir de las 3-4 semanas se iniciará tratamiento rehabilitador suave que, normalmente. Para más información te recomendamos acudir con un especialista en Neurocirugía.