¿Qué son las Esencias Florales?
Las Esencias Florales son preparados líquidos que contienen la vibración energética de ciertas flores. A diferencia de los aceites esenciales o extractos botánicos, las esencias no tienen componentes químicos activos; su efecto se basa en principios energéticos y vibracionales, actuando a nivel emocional, mental y espiritual.
El sistema más conocido es el de las Flores de Bach, desarrollado por el médico británico Edward Bach en la década de 1930. Sin embargo, hoy existen otros sistemas como las esencias florales de California, Bush (Australia), Orquídeas del Amazonas, entre otros.
¿Por qué se realiza este tratamiento?
El uso de esencias florales se realiza con el objetivo de:
- Equilibrar estados emocionales como Ansiedad, tristeza, miedo, enojo, culpa o inseguridad
- Favorecer el bienestar mental y la claridad emocional
- Complementar tratamientos médicos o psicológicos convencionales sin interferir en ellos
- Apoyar procesos de crecimiento personal, autoconocimiento y transformación interior
Es una terapia elegida por quienes buscan un enfoque holístico, respetuoso y no invasivo para tratar el malestar emocional.
¿En qué consiste?
El tratamiento con Esencias Florales se basa en una valoración emocional realizada por un Terapeuta Floral, quien escucha al paciente y selecciona las flores adecuadas de acuerdo con sus emociones y necesidades. Posteriormente:
- Se prepara un frasco personalizado con una combinación de esencias diluidas en agua y una pequeña cantidad de conservante (usualmente brandy)
- El paciente toma gotas sublinguales, varias veces al día, según las indicaciones del especialista
- Se realizan sesiones de seguimiento cada cierto tiempo (cada 2 a 4 semanas) para ajustar la fórmula si es necesario
Las esencias no tienen sabor, olor, ni efectos secundarios conocidos, y pueden ser utilizadas por personas de todas las edades, incluidos niños y mujeres embarazadas.
Preparación para el procedimiento
No se requiere una preparación médica o física específica antes de comenzar un tratamiento con Esencias Florales. Sin embargo, es útil:
- Estar abierto a explorar las emociones con honestidad
- Llevar un registro de los síntomas emocionales o situaciones que generan malestar
- Informar al terapeuta sobre cualquier tratamiento psicológico, psiquiátrico o médico que se esté siguiendo
Esta información ayuda a una mejor valoración y selección de esencias.
Cuidados tras la intervención
Aunque no es un procedimiento médico como tal, el tratamiento con esencias florales requiere atención continua a las emociones. Después de comenzar su uso, se recomienda:
- Observar cambios emocionales o reacciones internas
- Anotar sueños, sensaciones o actitudes que surjan durante el proceso
- Asistir a las sesiones de seguimiento para ajustar las esencias según el avance terapéutico
El proceso puede generar catarsis emocional leve, ya que las esencias ayudan a liberar emociones contenidas.
Alternativas a este tratamiento
Las Esencias Florales forman parte de las Terapias Complementarias. Algunas alternativas o tratamientos afines incluyen:
- Homeopatía: otro método vibracional que emplea sustancias altamente diluidas
- Aromaterapia: uso de aceites esenciales con efectos emocionales y fisiológicos
- Terapia Psicológica Convencional: especialmente en casos donde se requiere un abordaje clínico
- Meditación y Mindfulness: técnicas para conectar con las emociones y generar equilibrio interior
- Acupuntura o Reiki: otras formas de terapia energética
Es posible combinar varias de estas terapias, siempre bajo supervisión adecuada.
¿Qué especialista lo realiza?
El tratamiento con Esencias Florales es realizado por un terapeuta floral certificado. En algunos países existen cursos y diplomados avalados por instituciones de salud alternativa. En otros casos, profesionales de la salud como Psicólogos, Médicos Integrativos, Enfermeros o Terapeutas Holísticos incorporan esta terapia como complemento a su práctica clínica.
Es importante elegir un Terapeuta que cuente con formación formal en Esencias Florales, ya que la selección adecuada depende de una profunda comprensión de la relación entre las emociones y las flores disponibles.