

Es una enfermedad cuyo inicio se da en las células hepáticas. Se produce cuando las células del cuerpo crecen de forma descontrolada.

Existen diferentes tipos, pero el más habitual es el de carcinoma hepatocelular. Otros tipos de Cáncer son:
La mayoría de personas no experimentan síntomas ante la presencia del Cáncer, pero cuando aparecen suelen producirse los siguientes:
La mayoría de Cánceres Hepáticos se detectan a partir del momento en el que empiezan a aparecer síntomas asociados a la enfermedad. No obstante, es cierto que algunos Cánceres de hígado se pueden diagnosticar mediante pruebas que se realizan a personas con un alto riesgo de padecerlo.
Las más habituales son:
La principal causa del Cáncer de Hígado responde a una mutación del ADN y, como resultado, se producen cambios en el organismo. Esa situación da lugar a que las células queden fuera de control y crezcan llegando a producir los conocidos tumores. Es decir, dan lugar a una masa de células cancerosas.
No siempre se conoce el origen de la enfermedad, ya que en ocasiones ésta aparece sin enfermedades previas.
Algunos de los factores de riesgo que dan lugar a la enfermedad son:
Debido a que la Cirrosis es uno de los diferentes factores de riesgo que pueden derivar en un Cáncer de Hígado, se pueden tomar medidas preventivas frente al mismo. Beber alcohol con moderación y mantener un peso saludable es una manera de prevención para mantener una salud en buen estado.
Otras medidas que se pueden tener en cuenta para reducir las probabilidades de desarrollar la enfermedad son:
Existen diferentes tipos de tratamiento en función del estadio en el que se encuentra el Cáncer. No obstante, los más habituales y a los que se recurren frecuentemente son:
El especialista en tratar el Cáncer de Hígado es el Oncólogo y el Gastroenterólogo.