¿Qué es la Amigdalitis?
La Amigdalitis es la inflamación de las Amígdalas, dos estructuras ubicadas en la parte posterior de la garganta que forman parte del sistema inmunológico. Su función principal es proteger al organismo de virus y bacterias que ingresan por la boca o la nariz.
Esta inflamación puede ser causada por infecciones virales o bacterianas y se manifiesta con dolor de garganta, fiebre y dificultad para tragar. Dependiendo de su duración y frecuencia, se clasifica en:
- Amigdalitis Aguda: dura entre 3 y 14 días y es común en niños y adultos jóvenes
- Amigdalitis Recurrente: ocurre varias veces al año
- Amigdalitis Crónica: se prolonga por semanas o meses y puede requerir tratamiento especializado
Pronóstico de la enfermedad
El pronóstico varía según la causa y la respuesta al tratamiento. En la mayoría de los casos, la Amigdalitis se resuelve sin complicaciones, especialmente cuando es viral. Sin embargo, si es de origen bacteriano y no se trata adecuadamente, puede generar problemas como:
- Abscesos periamigdalinos
- Fiebre Reumática (si la causa es el estreptococo del grupo A)
- Glomerulonefritis Postestreptocócica (afectación renal)
- Amigdalitis Crónica con dificultad para respirar o tragar
En casos graves o recurrentes, puede recomendarse la extirpación de las amígdalas (Amigdalectomía).
Síntomas de la Amigdalitis
Los síntomas varían según la causa y la gravedad de la infección, pero los más comunes incluyen:
- Dolor de garganta intenso
- Dificultad para tragar
- Inflamación y enrojecimiento de las amígdalas
- Puntos blancos o pus en las amígdalas
- Ganglios linfáticos inflamados en el cuello
En algunos casos, se pueden presentar síntomas adicionales, como:
- Fiebre y escalofríos
- Dolor de cabeza
- Mal aliento
- Voz apagada o gangosa
- En algunos casos, dolor de oído
Si la inflamación es severa, puede causar dificultad para respirar o ronquidos al dormir.
Pruebas médicas para diagnosticar
El diagnóstico de la Amigdalitis se basa en la historia clínica y el examen físico del paciente. Para confirmar la causa, pueden realizarse pruebas como:
- Examen físico: inspección de la garganta y palpación de los ganglios linfáticos
- Prueba Rápida de Estreptococo: detecta en minutos si la infección es causada por estreptococos del grupo A
- Cultivo de garganta: si la prueba rápida es negativa, pero hay sospecha de infección bacteriana, se envía una muestra de exudado faríngeo a laboratorio
- Análisis de sangre: puede ayudar a determinar si la infección es viral o bacteriana, especialmente en casos de Mononucleosis
Un diagnóstico preciso es clave para administrar el tratamiento adecuado.
¿Cuáles son las causas de la Amigdalitis?
Las principales causas de Amigdalitis son:
Infecciones virales (más comunes)
- Rinovirus (resfriado común)
- Adenovirus
- Virus de Epstein-Barr (Mononucleosis)
- Virus de la influenza (Gripe)
- Virus del herpes simple
Infecciones bacterianas
- Estreptococo del grupo A (Streptococcus pyogenes): es la causa más común de Amigdalitis bacteriana y puede derivar en fiebre reumática si no se trata adecuadamente
- Otras bacterias menos frecuentes incluyen Staphylococcus aureus y Haemophilus influenzae
La transmisión ocurre por contacto con gotículas de saliva al toser, estornudar o compartir utensilios contaminados.
¿Se puede prevenir la Amigdalitis?
Si bien no siempre se puede evitar, algunas medidas ayudan a reducir el riesgo de Amigdalitis:
- Higiene de manos frecuente para evitar la propagación de virus y bacterias
- Evitar el contacto cercano con personas enfermas
- No compartir cubiertos, vasos o cepillos de dientes
- Mantener una buena hidratación y alimentación balanceada para fortalecer el sistema inmunológico
- Uso de mascarilla en épocas de alta incidencia de infecciones respiratorias
Para personas con Amigdalitis recurrente o crónica, un especialista puede evaluar la necesidad de una Amigdalectomía.
Tratamientos para la Amigdalitis
El tratamiento depende de la causa y la gravedad de la inflamación.
Amigdalitis viral
No requiere antibióticos y se trata con medidas para aliviar los síntomas:
- Reposo y buena hidratación
- Analgésicos y antipiréticos (paracetamol, ibuprofeno)
- Gárgaras con agua salada para reducir la inflamación
- Humidificadores o inhalaciones de vapor para aliviar la congestión
Amigdalitis bacteriana
Si es causada por estreptococo del grupo A, se requiere tratamiento con antibióticos, generalmente penicilina o amoxicilina. Completar el ciclo es fundamental para evitar complicaciones.
Amigdalitis crónica o recurrente
En casos graves o cuando hay infecciones frecuentes (más de seis episodios en un año), el especialista puede recomendar la Amigdalectomía, una cirugía para extirpar las amígdalas y prevenir futuras infecciones.
¿Qué especialista trata la Amigdalitis?
Dependiendo de la severidad, el tratamiento puede ser realizado por especialistas en Otorrinolaringología y Otorrinolaringología Infantil. En algunos casos, también se puede requerir la participación de un Médico general o Pediatra para el diagnóstico inicial y tratamiento de casos leves, o un Infectólogo, en casos de infecciones severas o resistentes a los antibióticos
Consultar a un especialista es clave si la Amigdalitis es frecuente, severa o no mejora con el tratamiento.