Identifica si un menor necesita ser llevado a Urgencias Pediátricas
Ante una Emergencia, llame con anticipación a su Pediatra para que el personal de emergencias lo espere. Ante una emergencia grave, los padres no deben dudar en llamar al 123
Asistencia adecuada
Un padre de familia siempre quiere lo mejor para su hijo y, por esta razón, siempre será motivo de preocupación verlo enfermo o accidentado. Los niños, a lo largo de su vida, pueden presentar diversas patologías, en su gran mayoría virosis, caídas, accidentes caseros, entre otros.
Sin embargo, hay parámetros que deben considerarse antes de llevar a los niños a urgencias, con el fin de no sobresaturar dicha área de la unidad médica asistiendo por patologías a las que se les puede dar un manejo en casa o por cita de consulta externa. Peor aún sería el caso contrario, en el que nos quedamos en casa y el niño empeora de gravedad por no llevarlo oportunamente a urgencias.
Conoce los signos de alarma para saber cuándo asistir a urgencias
Algunos de los padecimientos que son más frecuentemente atendidos en el servicio de Urgencias Pediátricas son:
- Fiebre: es considerada Fiebre la temperatura superior a 38 ° C. Inicialmente, se le puede dar manejo en casa, pero si esta no disminuye con la administración de antipiréticos o si no existe otro síntoma asociado, debe consultar con urgencias
- Dificultad Respiratoria: si el menor tiene Tos o congestión nasal y además se le hunden las costillas al respirar, tiene respiración acelerada; se agita al caminar, hablar o, en el caso de los bebés, succionar la teta o el tetero, se debe acudir inmediatamente
- Episodios de Cianosis o Desvanecimiento: esto sucede cuando el menor presenta una coloración azulada en los labios, en los dedos de las manos y en los pies, causada por el bajo contenido de oxígeno en la sangre. Esto puede ocurrir mientras el niño está descansando o cuando está activo
- Diarrea o Vómito: Signos de deshidratación, ojos hundidos, llanto sin lágrimas, boca seca, vomita todo lo que come, más de 10 deposiciones líquidas o episodios eméticos en el periodo de una a dos horas
- Intoxicaciones: Intoxicación alimentaria, aparición de ronchas en todo el cuerpo, Tos o dificultad para respirar posterior a la ingesta de un alimento específico
- Ingesta accidental o intencional de medicamentos, elementos extraños que puedan obstruir la vía respiratoria o digestiva, ácido o corrosivos
- Accidentes en casa: quemaduras por líquido hirviente, caídas con posterior vómito o pérdida del estado de conciencia o mordedura por algún animal no vacunado
- Caídas: con posibles deformidades en los miembros que implique Fractura o heridas profundas o con sangrado que no sede ante la presión por más de 10 minutos
Procesos a seguir ante una Urgencia Pediátrica
Es muy importante conocer el tipo de seguro o empresas prestadoras de salud a los que el menor está afiliado e identificar cuáles son los puntos de atención de urgencias previamente, para cuando se necesite. Si se encuentra en etapa escolar puede solicitar está información en la escuela y trasladarlo inmediatamente a su clínica más cercana.
Si el niño presenta alguna enfermedad de base, por ejemplo, Cardiopatía, Epilepsia, Asma o alguna otra que pueda generar alguna crisis mientras esté en la escuela, de igual forma debe dar previo aviso a las profesoras para que sepan que hacer y a dónde llevarlo en caso de que lo requiera.
Ante una Emergencia en casa, llame con anticipación a su Pediatra para que el personal de urgencias lo espere. Ante una emergencia grave, los padres no deben dudar en llamar al 123.
Es importante ser responsables con la salud de los niños, por lo tanto, debe evitar la automedicación o preguntar a farmaceutas cuál es el mejor jarabe, ya que posiblemente no será el adecuado o su dosis no será la correcta.
Por último, si los síntomas presentados por el o la menor no están incluidos en esta lista o son síntomas leves, consulte a su pediatra por medio de consulta externa.