¿Qué es la Histeroscopía Láser?
La Histeroscopía Láser es un procedimiento mínimamente invasivo que permite diagnosticar y tratar diversas afecciones del útero utilizando un histeroscopio y tecnología láser de alta precisión.
Este método se emplea para remover Pólipos, Miomas, adherencias o corregir Malformaciones Uterinas sin necesidad de incisiones externas, lo que reduce el tiempo de recuperación y el riesgo de complicaciones.
¿Por qué se realiza?
La Histeroscopía Láser se recomienda en casos de:
- Sangrado uterino anormal
- Pólipos endometriales
- Miomas Uterinos pequeños
- Síndrome de Asherman (adherencias uterinas)
- Malformaciones Uterinas (como el tabique uterino)
- Infertilidad de causa desconocida
- Retiro de Dispositivos Intrauterinos (DIU) incrustados
Este procedimiento ofrece un enfoque seguro y menos invasivo en comparación con la cirugía tradicional.
¿En qué consiste la Histeroscopía Láser?
El procedimiento de la Histeroscopía Láser consiste en:
- Colocación del histeroscopio: se introduce un tubo delgado con una cámara a través del cuello uterino para visualizar la cavidad uterina
- Insuflación con solución salina o gas: se expande el útero para mejorar la visualización
- Uso de tecnología láser: se eliminan Pólipos, Miomas o adherencias con un haz de luz láser de alta precisión
- Finalización del procedimiento: una vez realizado el tratamiento, se retira el histeroscopio y se monitorea la recuperación de la paciente
La intervención suele durar entre 15 y 45 minutos, dependiendo de la complejidad del caso.
Preparación para el procedimiento
Para asegurar una Histeroscopía Láser segura y efectiva, la paciente debe seguir estas recomendaciones:
- Realizarse una Ecografía Transvaginal para evaluar el estado del útero
- Evitar el uso de tampones o duchas vaginales antes del procedimiento
- En algunos casos, el médico puede recetar medicamentos para dilatar el cuello uterino
- Ayuno de 6 a 8 horas, si se requiere anestesia
Es fundamental seguir las indicaciones médicas para minimizar riesgos y mejorar la efectividad del procedimiento.
Cuidados tras la intervención
Después de la Histeroscopía Láser, la recuperación es rápida y con pocas molestias. Las recomendaciones incluyen:
- Reposo relativo durante las primeras 24 horas
- Evitar relaciones sexuales y tampones por al menos una semana
- Control del dolor con analgésicos suaves, si es necesario
- Monitoreo de síntomas como fiebre, sangrado abundante o dolor intenso
La mayoría de las pacientes pueden retomar sus actividades diarias al día siguiente del procedimiento.
Alternativas a este tratamiento
Si la Histeroscopía Láser no es viable, existen otras opciones:
- Histeroscopía convencional, con instrumentos mecánicos o eléctricos en lugar de láser
- Cirugía Laparoscópica, recomendada en casos más complejos
- Medicamentos hormonales, que pueden controlar algunos trastornos uterinos
El especialista determinará la mejor opción según el diagnóstico de la paciente.
¿Qué especialista realiza la Histeroscopía Láser?
Este procedimiento es realizado por un Ginecólogo especializado en Cirugía Mínimamente Invasiva.
Es recomendable acudir a un profesional con experiencia en Histeroscopía Láser para garantizar un tratamiento seguro y eficaz.