Ventajas del Relleno Facial con Ácido Hialurónico
Uno de los métodos utilizados para la corrección de los cambios en la cara, debidos a la edad, es el relleno facial por medio de inyecciones de Ácido Hialurónico. Una de las principales ventajas de dichas inyecciones es que se realizan de una manera muy rápida y el efecto aparece inmediatamente
El Relleno Facial es un procedimiento indoloro
Los Rellenos Faciales son un procedimiento prácticamente indoloro que permite eliminar las arrugas y pliegues producidos por los movimientos repetitivos de la mímica facial en pacientes que no requieren una intervención quirúrgica para lograr éste objetivo. Las zonas en que más frecuentemente se realizan procedimientos de relleno son el área del ceño y los pliegues del área naso-labial en forma de paréntesis. Así mismo se realizan inyecciones de relleno en los pliegues que se forman en los extremos de los labios inferiores, e inyecciones propiamente en los labios para el aumento y corrección del contorno de los mismos.
Algunas de las ventajas de este procedimiento son el tiempo de aplicación de dichas inyecciones que es muy corto (no más de 30 minutos) y que los productos utilizados son absolutamente inocuos para la salud, no producen efectos adversos ni provocan Reacciones Alérgicas. Al contrario, el efecto del Ácido Hialurónico al inyectarse en las células de la piel influye positivamente y hace más productiva la síntesis hormonal, más efectivo el tránsito del oxígeno por los capilares, y aumenta la funcionalidad de otros micro elementos contenidos en el organismo.
El efecto de las inyecciones varía de 6 meses a un año, dependiendo de las particularidades del metabolismo de cada paciente. Posteriormente, el Ácido Hialurónico se degrada de forma natural y se convierte en agua y gas carbónico. La aplicación se puede repetir sin problemas al término de su efecto. No existe contraindicaciones ni limitación de aplicaciones.
El Ácido Hialurónico no es un compuesto que cause efectos secundarios y favorece ciertos procesos en la piel
Hoy en día el único producto que genera buenos resultados para lograr los objetivos arriba descritos y que es aprobado por las sociedades científicas del mundo para su utilización en procedimientos estéticos, además de no producir efectos secundarios graves que atenten contra la salud de los pacientes, es el Ácido Hialurónico. Este no produce Reacciones Alérgicas, pues se trata de un preparado óptimamente aproximado al componente natural contenido en la piel de los seres humanos, el cuál responde por la síntesis de la elastina y el colágeno.
Los pacientes no requieren ningún tipo de test de tolerancia hacia estos productos, pues, en toda la historia de utilización práctica de los derivados del Ácido Hialurónico no han sido registrados efectos nocivos para el metabolismo del ser humano. Por medio de su aplicación se acelera el proceso de síntesis de sustancias bioactivas, los procesos de cicatrización, se tonifica la piel logrando un efecto de recuperación de elasticidad y de rejuvenecimiento. Dicho efecto se puede apreciar inmediatamente después de terminado el procedimiento.
La elasticidad de la piel disminuye con los años
Según estudios científicos, en individuos con peso promedio de 70 kg. se contiene aproximadamente 15 gr. de Ácido Hialurónico. A la edad de 25 años en nuestro organismo se inician procesos irreversibles que conllevan al envejecimiento de la piel. La cantidad de Ácido Hialurónico producida por el organismo se reduce. Las células no pueden mantener la cantidad suficiente de humedad para lograr la elasticidad necesaria de los tejidos. Hacia los 50 años de edad, el nivel de ésta sustancia indispensable se reduce en nuestro organismo a 7-8 gramos.
Otras propiedades del Ácido Hialurónico
Según las últimas investigaciones científicas, se han descubierto nuevas propiedades de los biogeles de Ácido Hialurónico. Estos productos son tan aproximados a los naturales que inducen a las células del organismo a la síntesis de fibroblastos, es decir, a los precursores naturales del colágeno. Es por eso, que los derivados del Ácido Hialurónico activamente se utilizan en la producción masiva de productos anti-edad, cremas regeneradoras, mascarillas y geles para mejorar la cicatrización.