Trastornos del Neurodesarrollo ¿En qué afectan?
Atender los trastornos del Neurodesarrollo implica un enfoque integral que considera la complejidad de cada individuo y su interacción con el entorno.
Orígenes y características
El desarrollo del sistema nervioso es un proceso complejo que culmina en la maduración de estructuras y habilidades únicas para cada individuo. Enfrentarse a este fenómeno implica comprender la interacción dinámica y continua entre el individuo y su entorno, así como la detección temprana de posibles afectaciones.
Los trastornos del Neurodesarrollo, agrupados en el DSM-5, abarcan desde discapacidades intelectuales hasta trastornos alimentarios. Su origen se encuentra en el periodo de desarrollo, manifestándose con déficits específicos que afectan áreas concretas o de manera global. Detectar signos de afectación tempranamente es crucial para intervenir de manera efectiva.
Fases del neurodesarrollo anatómico y motor
El Neurodesarrollo anatómico inicia durante la gestación, con el rápido desarrollo embrionario y el crecimiento de estructuras clave del sistema nervioso. A partir de los tres años, el enfoque se traslada al desarrollo de la autonomía motora, donde el aprendizaje de conexiones neuronales es fundamental. Cualquier alteración en esta etapa sensible puede derivar en problemas como la parálisis cerebral o retrasos en el desarrollo del lenguaje.
Desde los tres hasta los diez años, se experimenta un rápido Neurodesarrollo del lenguaje y la comprensión del entorno. El periodo de tres a seis años se caracteriza por un progreso lingüístico significativo, mientras que, de los seis a los diez años, se enfoca en el desarrollo del pensamiento formal. Este periodo es crucial para la adquisición de habilidades, pero puede presentar trastornos debido a la falta de maduración de circuitos neuronales.
Identidad y cambios rápidos
Entre los 10 y los 20 años, se experimentan cambios rápidos en la identidad, la constitución corporal, la madurez sexual y cerebral. Durante esta etapa, la corteza prefrontal se fortalece, permitiendo la toma de decisiones y la autorregulación emocional. Sin embargo, esta fase también puede ser vulnerable a trastornos del desarrollo.
Diversidad de alteraciones y sus impactos
La variedad de alteraciones que afectan al sistema nervioso central es extensa, abarcando desde trastornos de comportamiento hasta problemas de sueño, alimentación y emocionales. Estos trastornos incluyen discapacidad cognitiva, trastornos del espectro autista, trastornos de ansiedad, entre otros. Su impacto no solo se limita al individuo, sino que también afecta su entorno psicosocial.
La detección temprana y la implementación de estrategias preventivas contribuyen al bienestar y desarrollo pleno de cada individuo.