La Terapia de Ondas de Choque y Ortobiológicos se ha consolidado como una alternativa terapéutica segura y eficaz para tratar diversas patologías del sistema musculoesquelético.
Su uso ha demostrado beneficios significativos en la regeneración tisular y en la recuperación funcional de pacientes, especialmente en el ámbito de la Medicina Deportiva y Ortopédica.
¿Qué es la Terapia de Ondas de Choque?
La Terapia de Ondas de Choque consiste en la aplicación de ondas acústicas de alta energía sobre los tejidos afectados, con el objetivo de inducir una respuesta biológica reparadora.
Este tratamiento, que inicialmente se popularizó en el área urológica para la disolución de Cálculos Renales (Litotricia), ha sido incorporado exitosamente en otras especialidades médicas como la Dermatología y, particularmente, la Ortopedia.
Mecanismo de acción: Mecanotransducción
El principio fundamental detrás de esta terapia es la Mecanotransducción, un proceso mediante el cual un estímulo mecánico —en este caso, el impacto de la onda— genera una respuesta biológica en el tejido.
Esto estimula la regeneración celular, la reparación del colágeno y la mejoría en la vascularización del área tratada.
Indicaciones aprobadas
Según la Sociedad Internacional de Terapia de Ondas de Choque, existen ciertas Patologías Musculoesqueléticas para las cuales esta terapia está especialmente indicada:
- Tendinitis calcificante del hombro
 - Epicondilitis lateral del codo (codo de tenista)
 - Tendinitis Patelar
 - Tendinopatía Glútea (gluteus medius y minimus)
 - Fascitis Plantar
 
Estas condiciones suelen ser crónicas o resistentes a otros tratamientos convencionales, y la Terapia con Ondas de Choque representa una opción no invasiva con buenos resultados clínicos.
Seguridad y efectos secundarios
La terapia es considerada segura cuando se aplica con una adecuada evaluación clínica y por profesionales certificados. No obstante, pueden presentarse efectos secundarios leves como:
- Dolor durante la aplicación (dependiendo de la intensidad utilizada)
 - Eritema o enrojecimiento de la piel en la zona tratada
 
Contraindicaciones
Aunque es una técnica segura, existen algunas contraindicaciones importantes:
- Pacientes con coagulopatías (trastornos en la coagulación sanguínea), debido al riesgo de hematomas
 - Presencia de tumores en la zona de tratamiento
 
Una correcta selección del paciente y una valoración clínica detallada son clave para minimizar riesgos y maximizar beneficios.
¿Qué son los Ortobiológicos?
Los Ortobiológicos son sustancias derivadas del propio cuerpo del paciente utilizadas con fines terapéuticos para estimular la Regeneración Tisular. Estos tratamientos se enmarcan dentro de la medicina regenerativa y buscan aprovechar el potencial biológico del organismo para reparar tejidos dañados.
Tipos de lesiones tratadas
En el campo musculoesquelético, los Ortobiológicos son comúnmente aplicados en:
- Lesiones Deportivas
 - Lesiones Tendinosas
 - Lesiones Musculares
 - Lesiones Ligamentarias
 - Lesiones Articulares
 
El objetivo principal es acelerar el proceso de curación, reducir el dolor y permitir un retorno precoz a la actividad física o deportiva.
Beneficios del uso de Ortobiológicos
Los principales beneficios incluyen;
- Disminución del tiempo de recuperación
 - Menor progresión de enfermedades crónicas
 - Estimulación del proceso regenerativo natural del cuerpo
 
Estos tratamientos, al ser biocompatibles y derivados del mismo paciente, presentan un bajo riesgo de efectos adversos, siempre y cuando se apliquen bajo supervisión médica adecuada.
Un enfoque complementario
Tanto la Terapia de Ondas de Choque como el uso de Ortobiológicos suelen emplearse en conjunto con la Fisioterapia, formando parte de un abordaje integral. Esta combinación potencia los efectos regenerativos y funcionales, mejorando los resultados clínicos en un menor tiempo.
La Terapia de Ondas de Choque y Ortobiológicos representa un avance importante en el tratamiento de lesiones musculoesqueléticas. Su efectividad, junto con su perfil de seguridad y su capacidad para acelerar la regeneración tisular, la convierte en una opción valiosa dentro del arsenal terapéutico de la Medicina Física y Ortopédica moderna. Siempre debe ser aplicada por profesionales capacitados, tras una evaluación clínica rigurosa, para asegurar su correcta indicación y evitar riesgos innecesarios.