El manguito rotador del hombro es una estructura conformada por varios tendones ubicados en la parte superior del hombro. Esta estructura puede sufrir Lesiones debido a procesos degenerativos o traumáticos, generando dolor y limitaciones en la movilidad.
Posibles causas de Lesiones
El manguito rotador está compuesto por cuatro músculos principales: supraespinoso, infraespinoso, redondo menor y subescapular. Sus tendones se unen a la cabeza del húmero, el hueso del brazo, permitiendo la rotación y elevación del brazo.
Las Lesiones del Manguito Rotador pueden ocurrir por dos causas principales:
- Procesos degenerativos: el desgaste natural del tendón con la edad, movimientos repetitivos (especialmente por encima de la cabeza) o el levantamiento de objetos pesados pueden debilitar los tendones con el tiempo, haciéndolos más susceptibles a Lesiones
- Lesiones Traumáticas: un golpe directo en el hombro, una caída sobre un brazo extendido o un movimiento brusco pueden causar desgarros agudos en los tendones del manguito rotador
Síntomas principales
El síntoma más común de una Lesión del Manguito Rotador es el dolor en el hombro, que puede variar en intensidad. Otros síntomas incluyen:
- Dolor que empeora al levantar el brazo o realizar movimientos por encima de la cabeza
- Dolor nocturno, que dificulta conciliar el sueño, especialmente al acostarse sobre el lado afectado
- Debilidad en el hombro
- Dificultad para alcanzar la espalda o realizar actividades cotidianas como vestirse o peinarse
- Chasquidos o crujidos en el hombro al moverlo
Proceso de diagnóstico
Un diagnóstico preciso es fundamental para determinar el tratamiento adecuado. El proceso diagnóstico generalmente incluye:
- Historia clínica: el médico preguntará sobre los síntomas, cómo se produjo la Lesión y el historial médico del paciente
- Examen físico: se realizarán pruebas específicas para evaluar el rango de movimiento, la fuerza y la estabilidad del hombro, identificando qué tendones podrían estar afectados
Estudios de imagen que solicitarán:
- Ecografía: puede ser útil para visualizar desgarros parciales o totales del tendón
- Resonancia Magnética (RM): es la prueba de imagen más precisa para evaluar las Lesiones del Manguito Rotador, ya que proporciona imágenes detalladas de los tejidos blandos, permitiendo determinar el tamaño, la ubicación y la gravedad del desgarro
Opciones de tratamiento
Tratamiento conservador (no quirúrgico)
Se recomienda para desgarros parciales o inflamación del tendón. Incluye:
- Reposo: evitar actividades que agraven el dolor
- Hielo: aplicar hielo en el hombro varias veces al día para reducir la inflamación
- Medicamentos: analgésicos y antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) para aliviar el dolor y la inflamación
- Fisioterapia: ejercicios específicos para fortalecer los músculos del hombro, mejorar el rango de movimiento y promover la curación
- Inyecciones de corticoides: pueden aliviar el dolor y la inflamación, pero se usan con moderación
Tratamiento quirúrgico
Se considera para desgarros completos del manguito rotador que no mejoran con el tratamiento conservador. La cirugía generalmente implica la reparación del tendón desgarrado, ya sea mediante una Artroscopia (Cirugía Mínimamente Invasiva) o una Cirugía Abierta.
Recuperación y rehabilitación
La recuperación de una Lesión del Manguito Rotador puede llevar tiempo, incluso con cirugía. La rehabilitación juega un papel fundamental en la recuperación completa y la prevención de futuras lesiones.
Un programa de Fisioterapia personalizado ayudará a restaurar la fuerza, la flexibilidad y el rango de movimiento del hombro.
Prevención de Lesiones del Manguito Rotador
Algunas medidas para prevenir Lesiones del Manguito Rotador incluyen:
- Calentar adecuadamente antes de realizar actividades físicas
- Fortalecer los músculos del hombro y la espalda
- Mantener una buena postura
- Evitar movimientos repetitivos por encima de la cabeza
- Levantar objetos pesados correctamente, utilizando las piernas y no la espalda
Si experimentas dolor persistente en el hombro, es importante consultar a un médico especialista para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados. Un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden ayudar a prevenir complicaciones a largo plazo y a recuperar la funcionalidad completa del hombro.